Centro de reclusorios en Chile

Este modelo se pone para contrastar que Colombia no es el único país latinoamericano con problemas de delincuencia

Centro de reclusorios en Chile
La UNICEF, organismo internacional encargado de la vigilancia a los niños, desarrollo una investigación en los centros de reclusión de Chile dando un balance negativo de estos centros. Lo anterior, lo hicieron siguiendo la ley penal adolescente No.20.84 del reglamento en sus artículos 90,91 y 159, donde se crean las Comisiones Internacionales de Supervisión (CIS) quienes se encargan de visitar por lo menos dos veces al año los centros de reclusión y supervisar si se les están respetando sus derechos como adolescentes y tienen optimas condiciones de vida al interior.
La educación, uno de los principales pilares que deberían tener estos centros, no la hay. Los jóvenes se quejan de largas horas libres donde la calidad y cantidad de los talleres impuestos tienen un fin recreativo y no son apropiados para sus edades y necesidades, esto conlleva a estar ansiosos y sentirse frustrados. Los programa de escolarización y capacitación son deficientes, hay escasez de personal o simplemente los profesores no asisten, no hay recursos materiales, hay suspensiones intempestivas y poca cantidad de horas de estudio.
Otro aspecto negativo es la falta de control y seguimiento en la salud. Esta carencia esta desde el que la persona ingresa al centro de reclusión y durante su estadía, problemas graves de salud como enfermedades de transmisión sexual y embarazos, no son controlados. Hay escases en el personal médico en consultas médicas, dentales, dentales, psiquiátricas y psicológicas. Esto provoca el maltrato y dopaje.
El aspecto más polémico, es que según la ley 20.084 de la UNICEF, donde prescribe en los artículos 75 y 105 del reglamento, los centros de reclusión chilena, usan como métodos de disciplina el aislamiento a celdas solitarias hasta por 22 horas, sentadillas y desnudos. Esto, se une a la falta de higiene, aseo y elementos necesarios como detergente, cepillo de dientes, crema dental, jabón y shampoo; esto afecta en su mayoría a la intimidad de las mujeres.
Todos los anteriores problemas resumen la opción de suicidio por la cual muchos optan. Solo resta aplicar el artículo 20 de la ley 20.084 que prescribe “que la sanción forme parte de una intervención socioeducativa amplia y orientada a la plena integración social.”

Informe ejecutivo de la UNICEF en Chile: http://www.emol.com/noticias/documentos/pdfs/informeunicef.pdf

Reclusorios en Bogotá

Reclusorios en Bogotá
Existen tres cárceles principales en la capital, La Picota, La Modelo y El Buen Pastor, además de estas existen varios reclusorios para menores y otros para solo mujeres y las inspecciones de policía. Según las cifras el 60% de los reclusorios recibe tutelas por violar el derecho a un trato digno, vida e integridad personal. Hacinamiento carcelario y condiciones inhumanas.
Estos reformatorios de menores tiene ciertas normas que no han sido cumplidas por la mayoría pues la sobrepoblación que se presenta es doble o mayor en reclusorios como “El Redentor”, donde los cupos se sobrepasan y las condiciones higiénicas no son favorables.
Hay un gran problema que afecta los menores que están estos reclusorios pues son maltratados continuamente con castigos duros, como en encierro en una celda por 72 horas, donde son maltratados con chorros de agua fría e intimidados con animales como ratas.
El objetivo principal es la rehabilitación de los jóvenes que en la mayoría de casos no se cumple y terminan escapando de los centros y volviendo a cometer los mismos delitos.

Delincuencia juvenil

La delincuencia juvenil se ha convertido en una situación crítica para los menores y para las leyes que los cobijan ya que de llegar a ser juzgados como mayores de edad se verían violados algunos derechos establecidos.
Según Childsoldiers Global Report, Colombia tiene una población de 45,6 millones de habitantes y 16,8 millones de estos son menores de 18 años, considerados menores de edad.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar ICBF es una entidad cuyo objetivo principal es dar respuesta a las necesidades y problemáticas en las que se ven inmiscuidos la mayoría de colombianos. En consecuencia con los abusos a los derechos de los niños y adolescentes el ICBF creó con la ley 1098 de 2006 el Código de infancia y adolescencia el cual quiere garantizar que los jóvenes colombianos crezcan en un lugar sano que les brinde las mejores condiciones.
Dentro de este código existe el Sistema de Responsabilidad Penal Para Adolescentes donde se considera que menores de 14 años no serán declarados responsables de ningún delito contrario a esto, considera que adolescentes entre 14 y 18 años son responsables de delitos cometidos.
Los beneficios legales que impone el código de infancia y adolescencia permiten, que los menores sean usados como títeres. Grandes delincuentes y actores del conflicto utilizan a los menores para realizar actos delictivos. Según la defensoría del pueblo el “20% de todos los niños y niñas en Colombia participan directa o indirectamente en el conflicto armado”, en el caso de la capital del país las cifras podrían aumentar ya que la mayoría de ciudadanos que han sufrido algún tipo de robo o atraco aseguran que al menos uno de los protagonistas es menor de edad.
Reformatorio, dulce hogar
La ley Colombiana establece un serie de centros en donde el menor es dispuesto a cumplir su pena muchas veces estos centros se convierten en hogares de paso en donde el joven delincuente no parece haber aprendido la lección.

Delincuencia juvenil